17.2.07

Que bien viven los pobres





La subida al glaciar Le Martial tuvo un primer intento fallido un día que el viento y la lluvia no nos dejaron avanzar. Mi frustración no era tanto por la caminata como por el paseito en aerosilla que (sí, soy cómoda) me encanta. Por suerte al día siguiente se pudo emprender la escalada. El tremendo frío que azotaba en la cima de la montaña -bueno, casi la cima- no impidió, al igual q habia pasado en el hito XXIV, un pequeño descanso tirados entre las piedras y el hielo. Igualmente, al regreso nos esperaba una merecida recompensa... mi primo Nelson que trabaja en un lindo hotel de la zona al que no voy a mencionar a menos q decidan pagarnos la publicidad, nos había ofrecido una tarde de spa con vista al Canal de Beagle... nunca viene mal un poco de relax calentito en el medio de un clima tan hostil. Nelson y su padre "julito", hermana y novia son los que nos acompañan en el restaurant de la foto, en una cena donde reflexionamos sobre el clima de isla que se respira entre los habitantes de ushuaia -es un mundo aparte-, las sobradas oportunidades de trabajo y la buena remuneración que proporciona en gran medida esa enorme afluencia de turismo de todas partes del mundo al lugar.